CONDICIÓN RESIDENTE: LA FORMACIÓN DE LA COMUNIDAD NEGRA SENHOR DO BONFIM/AREIA-PB
Resumen
Las comunidades negras contemporáneas, de múltiples orígenes, vislumbraron, con base en la aplicabilidad del artículo 68 de la Ley de Disposiciones Constitucionales Transitorias, contenida en la Constitución de 1988, que reconoce el derecho de propiedad sobre las tierras ocupadas por las comunidades remanentes de los quilombos, posibilidad de solucionar el problema territorial en el que se encontraban inmersos. A partir de procesos históricos de negación del derecho a la tierra, varias comunidades comenzaron a organizarse colectivamente en torno al tema de la tierra, con miras a conquistar lo que les había sido negado a lo largo de los siglos. La comunidad negra Senhor do Bonfim/Areia-PB, reconocida como comunidad quilombola el 18 de abril de 2005, demuestra la complejidad de las diversas experiencias vividas por la población negra en el período posterior a la abolición en el estado de Paraíba, que actualmente recibe el reconocimiento como comunidad quilombola. Su formación está ligada a una práctica recurrente en la ciénaga de Paraíba, la condición de habitante o “sujeción”. Se sabe que la abolición no trajo mejores condiciones de vida para estos, con eso, surgieron nuevas formas de sujeción, sin ningún aparato legal, no había más remedio que vivir, asimétricamente en relación a los dueños de los ingenios, en este frágil derecho a la tierra. Con el fin de comprender esta experiencia, abordaremos el proceso de formación de la comunidad en el municipio de Areia, a través del uso de los censos demográficos (1872-2010), la historiografía local y los relatos orales de los habitantes.